Absolutamente NO.
A nuestro centro de Marbella, nos llegan cada día muchas mamás y papás con las mismas dudas sobre como actuar en casa cuando hay piojos y liendres. Como limpiar, desinfectar, erradicar y quedarse tranquilos de que no queda nada de ellos escondido en cualquier lugar de casa.
Hervir peines, cepillos y meter los coleteros en amoníaco, lejía o vinagre. Lavar toda la ropa de cama y toallas a 90ºC y poner árbol del té con el suavizante.
Realmente nada de todo eso es “necesario”.
No estamos “esterilizando” la ropa u objetos para terminar con una bacteria, estamos tratando de que no queden molestos piojos o ninfas adheridos a la fibra de la ropa o en cualquier objeto.
Pues bien, lo que puede quedar es normalmente algo del tamaño de un par de milimetros (fotos abajo) o más, aunque también es posible y no descartable que una ninfa recién nacida se quede depositada en cualquier sitio donde se apoye la cabeza (ninfas de grado 1,2 ó 3). En cualquier caso será más fácil matarlos con el frío que con el calor.
El piojo tiende a buscar nuevos lugares que colonizar cuando alcanza su nivel de crecimiento casi adulto (ninfa grado 3) y en este tamaño lo podemos ver fácilmente sobre una sábana blanca o sobre la almohada.
Nunca se meten dentro de las fibras como si fueran ácaros, su tamaño no se lo permite. Hay padres que piensan que los piojos se pueden meter dentro de almohadas y edredones o que ponen sus huevos ahí y que los huevos o liendres también se pegan.
Nada más equivocado, en el caso de las liendres solamente terminan eclosionando si están en situación optima adheridas al cabello, nunca eclosionan fuera de nuestras cabezas ya que necesitan incubarse ahí con la humedad y temperatura necesarias.
Un piojo o ninfa puede vivir hasta 48 horas fuera de nuestras cabezas y eso si la temperatura ambiente no es muy fría. En primavera o verano es seguro que pueden durar más, pero en otoño o invierno de seguro que pueden morir en horas al no tener la temperatura óptima para ellos que es de 37ºC, la temperatura de nuestra cabeza. También hay que tener en cuenta que necesitan comer cada día y si los piojos o ninfas están dos días sin comer, fijo que mueren.
Se debe lavar la ropa de cama (funda de almohada y sábanas) a temperatura normal o fría y luego tender durante 24 horas o si tenemos secadora, secar en ella y luego directamente guardar.
Si el niño duerme habitualmente con uno o varios peluches, también podemos meterlos directamente en la secadora sin lavar o dejarlos una noche en la terraza si hace frío o simplemente en una bolsa dentro de la nevera.
Para los cepillos del cabello, peines, lazos, coleteros y otros complementos, aconsejamos meterlos en usa bolsa de plástico y colocarlos en la nevera durante una noche (NO HACE FALTA CONGELAR) o también podéis dejarlos fuera en la terraza o jardín para que les caiga el frío de la noche.
Debéis también tener la precaución de aspirar los asientos del coche (si el niño se ha montado en los últimos 2 dias). Si la temperatura ambiente es baja, también es suficiente con que se quede aparcado fuera toda la noche.
El sofá y sillones de casa donde se comparte el tiempo de relax habitualemente, deben aspirarse o por lo menos sacudirse a fondo con las manos y cubrir por un par de días con unas sábanas a modo de fundas.
Queridos padres y madres, son insectos, no son bacterias invisibles que debamos de matar con altas temperaturas o con pesticidas y productos químicos abrasivos.
No hagamos locuras por culpa del piojo ni trabajos extraordinarios que lo único que logran es estresarnos y estropear en muchas ocasiones ropa y objetos.